Por María Costa, Ingeniera Industrial y aprendiz de ambientóloga.

Llega esta época del año y algunos podéis disfrutar de unas merecidísimas y siempre muy cortas vacaciones…y si no, parece que simplemente las horas de luz nos hacen tener más ganas de disfrutar de ocio al aire libre. Así que vamos a escribir un poco sobre turismo. Pero claro, supongo que ya os habréis dado cuenta que lo que me gustaría tratar en este post es el turismo sostenible.

Sobre desarrollo sostenible creo y espero que a estas alturas no sea necesario volver a comentar nada que no sepamos. Me gustaría destacar sin embargo el concepto de desarrollo turístico sostenible, cuya importancia queda recogida en las directrices internacionales para el turismo sostenible de la Convención sobre Diversidad Biológica, la cual trata el turismo y la biodiversidad como un asunto transversal.

El turismo sostenible puede definirse como “el turismo que tiene plenamente en cuenta las repercusiones actuales y futuras, económicas, sociales y medioambientales para satisfacer las necesidades de los visitantes, de la industria, del entorno y de las comunidades anfitrionas”.

Existen varios hitos en la historia del turismo que ya tienen en cuenta el desarrollo turístico sostenible, no es algo nuevo.

De la misma manera que hay muchos tipos de turismo, podemos encontrar muchos tipos de turismo sostenible: natural (ecoturismo, rural, agroturismo, termal), urbano (congresos, convenciones), cultural (etnográfico, monumental, literario, musical), litoral, deportivo (aventura), etc. Los recursos turísticos también son muy variados: casas típicas locales, castillos, cuevas, bienes inmuebles etnológicos, tradiciones culturales, espacios naturales, fuentes termales, etc.

agroturismo

A continuación me gustaría citar una serie de herramientas para identificar opciones de turismo sostenible.

Como os podréis imaginar, principalmente los tiros van a ir hacia los Sistemas de Certificación Medioambiental, el Etiquetado Ecológico y el sistema de Banderas Azules de las playas, de manera que se unifiquen criterios de conservación y mejora ambiental y se puedan comparar destinos. Entre ellos destacamos los siguientes:

  • PROYECTO MUNICIPIO TURÍSTICO SOSTENIBLE. Iniciativa de la Federación Española de Municipios y Provincias para inscribir a los municipios turísticos que lo solicitaran como destino de calidad ambiental. Un ejemplo lo tenemos en Estella (Navarra).
  • MARCA “Q” VERDE. Marca de calidad turística ambiental, es una variante del distintivo “Q” de calidad turística. Se trata de un distintivo que se otorga a las empresas que cumplen los estándares ambientales establecidos en la norma. Empezó a desarrollarse en el sector hotelero y actualmente 50 hoteles de grandes y reconocidas cadenas se han comprometido a implantar el sistema de calidad, en destinos representativos del turismo español (Asturias, Benidorm, Costa del Sol, Granad, Menorca, Lanzarote y Tenerife).
  • HOTELES DE LA BIOSFERA. Es la distinción que se obtiene al certificar en el Sistema de Turismo Responsable, que difiere de otras certificaciones porque además desarrolla requisitos en otras áreas de la sostenibilidad como la Responsabilidad Social o la calidad de vida de la población local.
  • ETIQUETADO ECOLÓGICO. Se pretende orientar a los consumidores hacia servicios con efectos menos perjudiciales para el medio ambiente. Actualmente cuentan con esta posibilidad los alojamientos turísticos.

Por otro lado, también podemos citar como herramienta para localizar turismo sostenible la Agenda 21 Local de los municipios. Es un documento que pretende desarrollar un plan estratégico en el municipio para integrar, con criterios sostenibles, las políticas ambientales, económicas y sociales. Un ejemplo puntero está en Vitoria-Gasteiz.

Si estáis pensando visitar algún espacio protegido, podéis tener en cuenta la Carta Europea de Turismo Sostenible en Espacios Protegidos.

Por último me gustaría destacar esta noticia sobre el Camino de Santiago como modelo de turismo sostenible.

En cualquier caso, no hay turismo más sostenible que el que está en nuestras manos. ¡Feliz verano!