Por Javier Guillén, Responsable de Comunicación del Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de la Comunitat Valenciana.
Sabemos, o eso creemos que sabemos, sobre el potencial del fenómeno Industria 4.0, para la evolución y optimización de la organización de trabajo, la productividad y competitividad de los resultados.
También sabemos, entre otras cosas y tal y como se pudo comprobar recientemente en la jornada organizada por el Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de la Comunitat Valenciana, que se trata de una nueva realidad imparable. ¿Hablamos de un fenómeno más condicionado por las oportunidad que facilitan la inercia de la tecnología, una tecnología más viva que nunca, o por las necesidades de las empresas? El evento sobre el que gira este post:”Industria 4.0, disrupción global oportunidad local”, despejará algunas dudas al respecto. En cierto modo, son éstas las que se adaptan al nuevo menú que sirve la tecnología. Pero, cómo puede afectar este fenómeno a las Pymes, micro empresas que integran más del 90% del tejido productivo valenciano, con áreas y problemas comunes, tales como:
- Escaso tamaño
- Cultura empresarial
- Incapacidad de internacionalizarse
- Resistencia al cambio
- Problemas de financiación
- Escasa cultura tecnológica
Ellas son las protagonistas, pues esta claro que las grandes empresas adaptarán las ventajas de los nuevos sistemas de producción al Internet de las cosas sin demasiados esfuerzos. Pero, ¿y las Pymes? Esas pequeñas empresas que hacen posible un mercado en movimiento… Para estas y otras empresas, BBVA ha organizado el evento Industria 4.0: Disrupción global, oportunidad local un programa para ayudar a las empresas a entender el potencial de la Industria 4.0, para dar a conocer las tecnologías involucradas, las aplicaciones concretas y sus beneficios. Se trata de una serie de conferencias destinadas a todas aquellas personas con interés en conocer la nueva visión, el nuevo enfoque y un nuevo modelo necesario para conseguir una eficiencia sostenida en las tecnologías actuales. Durante este evento, que anticipa lo que ha de ser un compromiso y una responsabilidad para las Administraciones públicas involucradas en el avance de las empresas, los organizadores reflexionarán en torno a las oportunidades y retos de la nueva era industrial, nuevos sistemas de producción y otros elementos que, si no se pueden aplicar a la Pyme o los Gobiernos no facilitan su implantación, tan sólo generarán una brecha digital más, que en este caso afectará al mapa que empresarial que dibujará, donde unas progresas y otras contemplan su desaparición. No resulta sencillo acompasar la respuesta a las necesidades productivas diarias, con la formación e integración de elementos tecnológicos aplicados a la producción. Por ello, si esta jornada y otras contemplan a la Pyme como receptor principal, se avanzará en el camino adecuado. Si las Administraciones, las grandes instituciones, fundaciones, escuelas y todo tipo de entidades generadoras de conocimiento, no focalizan este conocimiento (vinculado a la Industria 4.0) a la Pyme, tan sólo se habrá conseguido un objetivo a medias, y las Pymes, la base de nuestro tejido empresarial, continuarán siendo cada vez más Pymes y a estar, cada vez, más lejos. El Gobierno vasco, desde su agencia de desarrollo, ya ha anticipado algún paso. Y ahí es donde entran las instituciones, y dentro de éstas, los colegios profesionales, pues juegan un papel crucial en el apoyo al crecimiento y desarrollo de profesionales. Es el caso del Colegio Oficial de Ingenieros Industriales, y la jornada sobre Industria 4.0 adaptada a la Pyme, que celebró recientemente. Este es el camino a seguir: transferir tecnología y conocimientos a las Pymes, pues de lo contrario, no cabe duda de que se terminará trasladando la brecha social existente, al tejido empresarial, lo que será un verdadero problema.