Por Rebeca Julve, ingeniera industrial.
En el mundo empresarial no existen fórmulas mágicas y únicas que garanticen el éxito. Por extensión eso es lo que ocurre en la logística. No hay una fórmula matemática en la que, partiendo de tres parámetros, consigamos saber un resulta único y concreto que nos indique exactamente qué pasos dar en nuestro departamento logístico para garantizar un funcionamiento eficaz y eficiente del mismo.
No obstante, a modo pequeña guía, sí podemos destacar algunas claves. Todas ellos “lógicas” pero no siempre en nuestro foco de atención.
Los cimientos son importantes. Por ello, antes de lanzarnos a incurrir en costes y desarrollos, es necesario un correcto análisis de las exigencias logísticas. ¿Qué quiere nuestro cliente? Si ofrecemos más de lo que nuestro cliente necesita y es capaz de percibir, estaremos incurriendo en un sobrecoste y una complejidad innecesarias.
¿Es necesario un plazo de entrega de 24 horas?¿ Nuestro cliente aceptaría un plazo de 48 horas sin por ello bajar su nivel de satisfacción?
¿Hasta dónde llegar con el nivel de subcontratación?. A todos nos parece lógico no tener camiones en propiedad, y recurrir a empresas de transporte para hacer llegar nuestra mercancía. Lo mismo que recurrimos al servicio de correos para enviar una carta y no nos desplazamos para ello por nuestros medios.
Por tanto está muy extendida la subcontratación del transporte. Pero ¿qué más podemos subcontratar? ¿hasta dónde debemos llegar en esta subcontratación? Debemos plantearnos cómo encontrar un equilibrio en el que nos beneficiemos de las ventajas de la subcontratación (optimización costes, flexibilidad, etc) SIN incurrir en la pérdida de control. Encontrar este equilibrio es clave para un correcto funcionamiento del departamento.
La página web Cadena de Suministro publicó en mayo de este año el resultado del ‘Estudio de caracterización del sector del transporte y la logística’, elaborado por la consultora Everis y auspiciado por las organizaciones UNO y CEL. Entre las conclusiones del estudio, la web cita “.. llama la atención el menor volumen del mercado logístico español, en relación al de sus socios europeos. Tomado como índice 100 el total correspondiente a España, el mercado de subcontratación logística en Alemania en 2010 era de 2,7 veces superior al español, el francés 1,41 veces y el británico e italiano, ambos con prácticamente el mismo volumen, 1,36 veces.”
Los límites de la logística deben estar definidos. Debe estar documentado dónde empieza y acaba la logística dentro de la organización de la compañía. Es un departamento que debe buscar soluciones transversales y que tiene que estar involucrado en las decisiones de otras áreas. Un lanzamiento de marketing de un nuevo producto que no cuente con el departamento de logística puede ser un total fracaso.
Así pues tiene que estar muy bien definido, y debe ser conocido a todos los niveles, el alcance y funciones del área de logística, así como los interlocutores con los que contactar para cada caso concreto.
No menos importante es la elección de profesionales. Deben seleccionarse perfiles adecuados a la responsabilidad que se va a adquirir. Como en cualquier otro área, el profesional debe contar con los conocimientos teóricos y prácticos necesarios para el correcto desarrollo de sus tareas. Cada día hay una mayor oferta formativa que permite formar a los mejores profesionales y como empresa deberíamos aprovechar esa ventaja competitiva que el mercado actual nos brinda.
Este listado de puntos como decíamos, no es una fórmula mágica. Pretende únicamente hacernos relexionar y servir como rápido “checkpoint” que nos permita analizar nuestra logística, sus debilidades y fortalezas.
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